Transformando la comunicación a través de la RSC

No podemos hablar de comunicación o de Responsabilidad Social Corporativa, sin centrarnos en la clave de cualquier relación, ya sea entre personas, entre empresas, entre persona y empresa, o entre cualquier otro binomio que se os ocurra. Se trata de la confianza. Es una palabra muy oída últimamente, y ¡hasta parece que la confianza cotiza en bolsa! Quizás por eso la empresa está cada vez más interesada en ser digna de confianza, y ser considerada digna de confianza que no es lo mismo. Pero ¿por qué confiamos en una empresa o marca?
La RSC es el vínculo emocional y real a largo plazo entre la empresa y sus públicos. Una relación compleja y agradecida, que va más allá de la relación proveedor-cliente. Y lo que la diferencia no es sólo su producto o servicio, sino sus valores. Déjenme que destaque dos, que me parecen clave: el diálogo y la transparencia.
La empresa no sólo necesita un altavoz para explicar lo que hace, esperando generar una opinión favorable sobre sí misma. La empresa debe escuchar y crear los canales de comunicación necesarios para poder mantener una relación bidireccional. Un diálogo. Y una de las exigencias que nos hacen los públicos objetivos para mantener esta relación de confianza y diálogo es la transparencia.
No hace falta profundizar mucho en los periódicos para ver que la sociedad tiene un mayor acceso a la información y se vuelve cada vez más exigente, para el bien de todos, porque la exigencia nos permite mejorar. Uno de los detonantes ha sido la incorporación de las redes sociales en la comunicación con nuestro entorno. Las herramientas digitales nos permiten establecer un diálogo fluido y responsable con nuestros públicos: nos permiten una mayor transparencia y trabajar en esta relación de confianza de la que hablábamos al principio.
La marca es ahora un ente vivo, que juega un papel en el desarrollo de la sociedad, que se preocupa por lo que le preocupa a su gente, que se mueve por lo que se mueve su entorno. Que se implica. Que es parte. Que se relaciona. Que merece confianza.
Nosotros ayudamos a las marcas a diseñar, construir y gestionar nuevos lazos con sus públicos de interés, la sociedad y su entorno. Y aunque sea descubrir la fórmula de la Coca-Cola, os confesaré cómo lo hacemos: Escuchando en lugar de oyendo. Mirando en lugar de viendo. Pensando en los demás con la misma intensidad con la que solemos pensar en nosotros mismos.
La empatía y la responsabilidad es vital para implicar a una empresa con su entorno y sus públicos objetivos. Compartiendo conocimiento. Compartiendo tiempo. Invirtiendo dinero. Incorporando esta forma de pensar, transversal, en las decisiones que toma la empresa y en cómo se relaciona.
Quisiera felicitar a la Federación con Niños con Cáncer por haber realizado la I Campaña de Empresas de Poderes Mágicos, de la que hemos podido ser partícipes, y a todas las «empresas colaboradoras» que ayudan a fomentar la RSC en causas sociosantarias.