El Fiscal de Germanwings. Un ejercicio memorable de transparencia

Hoy hemos asistido atónitos al relato medido y tasado de los últimos minutos del vuelo 4U9525 de Germanwings. Y lo más sorprendente de todo es que ha sido un fiscal el que ha arrojado luz (probablemente azuzado por la exclusiva del New York Times con la transcripción del audio de la caja negra) sobre lo ocurrido en la cabina de la aeronave, a tan solo 48 horas del siniestro. Lo más sorprendente de hecho, y algo a lo que no estamos muy acostumbrados a este lado de los Pirineos, es que su comparecencia haya ido acompañada de múltiples preguntas por parte de los medios. Las autoridades francesas están realizando una gestión comunicativa modélica en la que destaca el exquisito tratamiento a los familiares de las víctimas.
Y es que éste es el aspecto más delicado de este ejercicio informativo de gestión de crisis. En todo momento, las autoridades han puesto en el centro de su estrategia comunicativa a las personas. Desde la primera comparecencia del Presidente de la República, a los pocos minutos de la tragedia, y hasta la rueda de prensa del fiscal.
Asimismo, han liderado el proceso comunicativo y han preparado toda su respuesta operacional pensando en los familiares y en el inmenso dolor que sufren. Es por ello que antes de que el fiscal compareciese (a pocos minutos antes para evitar filtraciones a la prensa) se produjo la comunicación de las primeras conclusiones de las investigaciones a los allegados. Chapó para el gobierno francés.
Pero por si esto fuera poco, previendo que en el lugar puedan encontrarse los familiares del copiloto (y supuesto homicida voluntario) con el resto de los afectados, han decidido separarles.
Ahora sería conveniente, incluso, proteger (aunque parezca paradójico) de forma especial a los más allegados al supuesto autor. Van a ser sometidos a una persecución por parte de los medios para tratar de despejar los motivos que hicieron supuestamente al copiloto echar la nave abajo.
El último aspecto que van a tener que preparar las autoridades serán comparecencias informativas periódicas con los familiares. No solo para explicarles cómo progresan las tareas de rescate e identificación de cadáveres, sino también las investigaciones sobre lo ocurrido. El precedente está sentado.