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El Mercurio, uno de los principales medios escritos chilenos, se hizo eco del estudio «Análisis de las dimensiones reputacionales de los presidentes de Latinoamérica«, recientemente llevado a cabo por Consultores de comunicación online de 11 de nuestras oficinas –liderados por Iván Pino y Juan Arteaga–. En él, se pone de manifiesto una nueva realidad; una realidad en la que la comunicación de masas obliga a los líderes políticos a una mayor transparencia, ya que las redes sociales están dotando a los interlocutores del poder de pedir respuestas inmediatas y públicas.
Para alcanzar las conclusiones que pueden leerse en el artículo, se analizaron más de 7.600 menciones en Google, Twitter, YouTube y Facebook sobre 19 presidentes de América Latina. Además, el estudio ha puesto de manifiesto que para un político es clave trabajar en su identidad digital.
En la reseña se desmigan las conclusiones del análisis y centra la atención en el papel de Sebastián Piñera –antiguo presidente de Chile, que ejercía el cargo cuando se realizó el estudio–. Respecto a esto se ha pronunciado Juan Arteaga –director de comunicación online en LLORENTE & CUENCA México–, que recalca el peso del ex mandatario en Twitter «en donde concentraba la mayor parte de su actividad», al tiempo que pone de relieve «la diferencia poblacional de Chile con otros países, que limita su alcance y nivel de influencia»
El Mercurio, uno de los principales medios escritos chilenos, se hizo eco del estudio «Análisis de las dimensiones reputacionales de los presidentes de Latinoamérica«, recientemente llevado a cabo por Consultores de comunicación online de 11 de nuestras oficinas –liderados por Iván Pino y Juan Arteaga–. En él, se pone de manifiesto una nueva realidad; una realidad en la que la comunicación de masas obliga a los líderes políticos a una mayor transparencia, ya que las redes sociales están dotando a los interlocutores del poder de pedir respuestas inmediatas y públicas.
Para alcanzar las conclusiones que pueden leerse en el artículo, se analizaron más de 7.600 menciones en Google, Twitter, YouTube y Facebook sobre 19 presidentes de América Latina. Además, el estudio ha puesto de manifiesto que para un político es clave trabajar en su identidad digital.
En la reseña se desmigan las conclusiones del análisis y centra la atención en el papel de Sebastián Piñera –antiguo presidente de Chile, que ejercía el cargo cuando se realizó el estudio–. Respecto a esto se ha pronunciado Juan Arteaga –director de comunicación online en LLORENTE & CUENCA México–, que recalca el peso del ex mandatario en Twitter «en donde concentraba la mayor parte de su actividad», al tiempo que pone de relieve «la diferencia poblacional de Chile con otros países, que limita su alcance y nivel de influencia»
El Mercurio, uno de los principales medios escritos chilenos, se hizo eco del estudio «Análisis de las dimensiones reputacionales de los presidentes de Latinoamérica«, recientemente llevado a cabo por Consultores de comunicación online de 11 de nuestras oficinas –liderados por Iván Pino y Juan Arteaga–. En él, se pone de manifiesto una nueva realidad; una realidad en la que la comunicación de masas obliga a los líderes políticos a una mayor transparencia, ya que las redes sociales están dotando a los interlocutores del poder de pedir respuestas inmediatas y públicas.
Para alcanzar las conclusiones que pueden leerse en el artículo, se analizaron más de 7.600 menciones en Google, Twitter, YouTube y Facebook sobre 19 presidentes de América Latina. Además, el estudio ha puesto de manifiesto que para un político es clave trabajar en su identidad digital.
En la reseña se desmigan las conclusiones del análisis y centra la atención en el papel de Sebastián Piñera –antiguo presidente de Chile, que ejercía el cargo cuando se realizó el estudio–. Respecto a esto se ha pronunciado Juan Arteaga –director de comunicación online en LLORENTE & CUENCA México–, que recalca el peso del ex mandatario en Twitter «en donde concentraba la mayor parte de su actividad», al tiempo que pone de relieve «la diferencia poblacional de Chile con otros países, que limita su alcance y nivel de influencia»
